Las cifras de contagios, hospitalizaciones y fallecimientos por Covid-19 continúan en niveles muy preocupantes.
Ante estos datos, desde algunas comunidades autónomas ya se van planteando nuevas medidas. Con la vigencia del estado de alarma, las medidas actuales implican en Andalucía el confinamiento perimetral del conjunto de su territorio y de casi 450 de sus municipios, otros países de Europa ya están poniendo en marcha nuevos confinamientos, en este caso domiciliarios.
Un escenario sobre el que no hay un posicionamiento claro por parte del Gobierno autonómico. Ayer, en una entrevista a RTVE, el vicepresidente, Juan Marín, afirmaba que no descarta tener que poner en marcha el confinamiento domiciliario, de forma similar a la pasada primavera. a la espera de tener conclusiones sobre el resultado de las medidas vigentes.
Hoy mismo, en una entrevista a Antena3, el presidente, Juan Manuel Moreno, ha matizado y ha descartado poner en marcha el confinamiento domiciliario, por ahora. Prioriza otras medidas como restricciones de movilidad y de horarios comerciales y emplaza al análisis del impacto de las medidas actuales, vigentes hasta el 9 de noviembre.
Un escenario, el del confinamiento domiciliario, que puede llevar a otros, como el de la suspensión de la actividad presencial en los centros educativos y académicos. El secretario de Comunicación del sindicato del profesorado, Antonio Brea, destaca que las administraciones han hecho un esfuerzo de adaptación durante los últimos meses en lo referente a la enseñanza online; también, en la reducción de la brecha digital del alumnado. Sin embargo, destaca que los dispositivos para que el profesorado pueda desarrollar las clases bajo esta modalidad no acaban de llegar.
En cuanto a la formación específica para el profesorado sobre enseñanza online, Brea indica que se han puesta en marcha algunas acciones formativas, aunque hay carencias de base que requerirían un esfuerzo mayor tanto de las administraciones como del propio profesorado. Aun así, aunque considera que no se trata de una perspectiva óptima, considera que tanto el sistema educativo como el profesorado está bastante mejor preparado que en primavera ante un escenario de enseñanza online.
Para las madres y padres del alumnado, apuestan por que no se suspendan las clases presenciales si se producen restricciones más drásticas, como el confinamiento domiciliario.
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