El aeropuerto de Málaga-Costa del Sol continúa su camino hacia la normalización con un sensible aumento en las reservas de vuelos: un 55% más que la semana pasada. Francia, España, Alemania, Italia y Bélgica son los principales emisores de turistas hasta el aeródromo malagueño, que espera como agua de mayo la apertura de las fronteras exteriores de la UE para remontar la temporada. Pese al aumento de las reservas, el volumen de pasajeros está todavía en una cuarta parte de lo habitual en esta época del año.
No obstante, el sector turístico es bastante más optimista que durante la cuarentena, cuando muchos daban por completamente perdida la temporada de verano. Actualmente, las previsiones de reservas para el mes de julio estiman un 80% de ocupación en la provincia, con hasta un 90% de turismo nacional. Se estima que un 30% de los establecimientos no abrirán sus puertas y que los que lo hagan sufrirán una caída de la facturación de entre un 40% y un 50%. El turismo es el motor económico de la Costa del Sol, dando empleo directo en 2019 a más de 117.000 personas.
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