Los beneficiarios de estas ayudas podrán ser los municipios de menos de 20 mil habitantes y estarán dirigidas a equipamientos o maquinaria necesarios para la prestación de servicios públicos, obras en edificios municipales, estudios de inversión relacionados con planes de desarrollo local o inversiones para incentivar la actividad económica y la generación de empleo.
Estas ayudas, que cuentan con un presupuesto total de dos millones y medio de euros, se concederán por primera vez en régimen de concurrencia competitiva teniendo en cuenta criterios de despoblación.
Para adjudicar estas ayudas, se han tenido en cuenta cuestiones como la densidad de población, el crecimiento demográfico o el crecimiento vegetativo con el objetivo de evitar que la población rural siga huyendo hacia las ciudades.
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