Este es el resultado que ofrece el informe que realiza anualmente la Asociación estatal de directoras y gerentes en servicios sociales.
Entre otras cuestiones, este informe arroja un dato preocupante: el aumento de la burocracia. Según la asociación, en un momento tan delicado como el actual, la complejidad burocrática se ha incrementado, y constituyen auténticas barreras que dificultan que las personas puedan hacer uso efectivo de las prestaciones y servicios sociales cuando más los necesitan.
Según este informe, las comunidades que mejoran con respecto a 2018 son la Andalucía, Comunidad Valenciana, Navarra, Euskadi, Extremadura y Aragón. Los 11 restantes empeoran su resultado y las que mayor retroceso registran son Cantabria, Canarias, Cataluña, Galicia y La Rioja. Madrid sigue siendo la Comunidad con peor calificación de sus servicios sociales en 2020.
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